Conocer o determinar la conveniencia para el
país, estado o región de ejecutar un proyecto específico.
Hace posible comparar proyectos para priorizar
programas en términos de la aportación que éstos
hacen a la riqueza y al bienestar social de la región o
del país.
Asegura que la generación de empleo se
traduzca en beneficios reales, a lo largo de la vida del proyecto,
al recomendar los proyectos que son rentables para la sociedad.
Maximiza los beneficios que se obtienen de un
presupuesto limitado, al distinguir entre los proyectos que reportan
beneficios netos al país de los que generan costos netos.
Ahorro en recursos públicos, al evitar
proyectos que no reportan un beneficio real.
En el caso de proyectos financiados con recursos
públicos y que superan el monto establecido por la SHCP,
se cumple con la normatividad vigente para el desembolso de recursos.